Recientemente, por este motivo, las autoridades eclesiásticas decidieron que sus reliquias y las de Juan XXIII permanecieran en la Capilla de los Charros del Pedregal. Este acontecimiento forma parte de la preparación a la canonización de los dos Beatos, que será el 27 de abril. Con motivo de la celebración por la llegada de las reliquias se celebraron dos misas. Los más de 50 charros y amazonas del Pedregal colocaron la urna frente al altar para que los asistentes pudieran pasar a verla.