El ganadero y descubridor de ‘Evento’, ‘Flamenco’, ‘Invasor’, Rafael Soto e Ignacio Rambla, Álvaro Domecq Romero, organizó un emotivo homenaje a los jinetes olímpicos jerezanos y al mozo de ‘Invasor’, Antonio Camarena, en la bodega familiar Pilar Aranda. Al acto asistieron los compañeros de la Real Escuela del Arte Ecuestre de ambos deportistas, así como familiares, amigos, aficionados e incluso el ex rejoneador y ganadero Álvaro Domecq Díez. Un emocionado Álvaro Domecq Romero agradeció a sus ‘hijos’ Soto y Rambla llevar al caballo español hasta el máximo nivel deportivo y les invitó a no dejar de trabajar por el caballo ni por la Escuela. En este sentido, Domecq Romero subrayó que los jinetes de la Real Escuela “no quieren caballos ya domados, quieren potros nuevos para ser domados allí, que es para lo que se creó la institución”. El ganadero, visiblemente emocionado, con ambas medallas colgadas al cuello y agarrado a las solapas de su chaqueta como queriendo contener la emoción, pasó la palabra a los jinetes, quienes consideran a ‘Alvarito’, como un segundo padre. Tras el homenaje, donde recibieron cada uno una placa conmemorativa, Rafael Soto depositó la corona de laureles sobre los pies del Cristo del Prendimiento de Jerez, cofradía de la que es hermano, mientras que Rambla hizo lo propio en la basílica de La Merced, patrona de la ciudad.