Once años después, el cochero nacional más laureado de todos los tiempos, Juan Robles Marchena, ha tenido que bajar de su pescante de oro para ceder el sitio a un alumno suyo, José Barranco Reyes, que acaba de proclamarse el nuevo campeón de España de Enganches en la modalidad de Cuartas, después de hacer un impecable y formidable concurso en la Antigua Escuela de Caballería de Valladolid, donde se disputó el Campeonato el 3, 4 y 5 de septiembre.
El ascenso del cordobés
Dos factores se encontraron en Castilla y León para destronar a Robles. En primer lugar, su propia prueba de Doma, que no fue la más correcta. Un guía de su fantástica cuarta, ‘Gecido’, rompió el aire durante todo el ejercicio y se mostró insumiso, dos defectos básicos que obligó al Jurado (formado por Carlos Gómez Perezagua, Jochen Lagen, Francisco Remesal, Madalena Abecasis y Juan Esteve) a puntuar a la baja. Por otro, la espectacular progresión de José Barranco Reyes, que ha convertido a sus fabulosos cuatro caballos holandeses en uno de los mejores equipos europeos del momento. El cochero cordobés ha reconocido que en estos últimos meses ha sido bastante más constante en el trabajo diario con los caballos. A pesar de que la cuarta que guía Barranco es entrenada y trabajada normalmente por Juan Robles Marchena, lo cierto es que la progresión de Barranco en estos últimos meses ha sido totalmente fulgurante.
Para que se hagan una idea de la línea dibujada por ambos, José Barranco aventajó al ex campeón de España de la disciplina en más de 13 puntos tras la prueba de Doma. La remontada de Robles se antojaba pues imposible.
El Maratón creó un abismo
El Maratón es, junto a la prueba de Doma, la jornada en la que mejor se defiende el cochero del Depósito de Sementales de Écija. Sin embargo, esta diferencia de nota era un abismo y muy feo se debía dibujar el panorama a Barranco para que se le cayera la medalla de Oro del pescante. Robles, que había optado por enganchar un potro nuevo con los experimentados caballos de concursos, no rindió al cien por cien. El caballo novel no tenía el mismo tiempo de reacción que el resto del equipo a la entrada de los obstáculos y el cochero tuvo que estar continuamente avisándolo con la voz, lo que le llevó a acabar en segundo lugar la segunda prueba del Campeonato. El recorrido diseñado magistralmente por el técnico José Gayán era muy cómodo para cocheros y caballos entrenados y cada uno de los participantes hizo lo que tenía que hacer, en especial Barranco y Robles: el primero, afianzar su liderazgo y el segundo, luchar por la remontada.
Juan Robles fue el primero en salir en la prueba de Manejabilidad, que se convirtió a la postre en la mejor intervención del día, después de acabar sin penalidad un sinuoso y técnico trazado de conos. Barranco, con trece puntos de diferencia sobre su más inmediato rival, ejecutó una manejabilidad conservadora. A pesar de que cometió algún derribo y penalizó por excederse del tiempo concedido, el cómputo de la manejabilidad de Barranco ascendió a 8,5 puntos, nota que le seguía asegurando la presea de Oro.
La tercera plaza se la adjudicó Juan Pedro Redondo, que defendió su actuación durante todo el Campeonato tras ejecutar tres pruebas con muy buena nota. El cuarto participante de la categoría de Cuartas con opción a medalla, el cordobés Antonio Carrillo, no pudo finalizar el Campeonato, pues uno de sus caballos no logró pasar el control veterinario previo a la prueba de Manejabilidad.
El rey del Tronco
Más de veinte enganches se desplazaron hasta Valladolid para disputarse las medallas de la categoría de Tronco, a pesar de que desde el principio los cocheros catalanes y de Levante dominaron de principio a fin la competición. Destacaron las pruebas de Doma de Manuel Úbeda y José María Ferrete Nieto, pese a que ninguno de los dos consiguieron subir a lo más alto. Con todo, el andaluz se colgó el Bronce, pues una espectacular remontada en el Maratón y una brillante Manejabilidad le otorgaron el reconocimiento.
Si de algo se caracteriza el Campeonato de España de Enganches es de ‘invitar’ a los carruajes enganchados con un solo caballo. Seis limoneras en total participaron en esta nueva edición del Campeonato, destacando la actuación de Rafael Barrachina, que aunque no ejecutó la mejor reprise de Doma, fue el participante que mejor Manejabilidad desarrolló, frente al resto de participantes que no estuvieron muy acertados con el trazado de Gayán.
Homenaje a José Lobo
La organización del Campeonato de España de Enganches rindió además un merecido homenaje al cochero portugués José Lobo Guedes, que fue invitado a participar fuera de competición en el concurso. El cochero, de esta forma, dice adiós a la competición, hecho por el que sus compañeros de modalidad le obsequiaron con una emotiva placa conmemorativa que le entregaron en el concurso.
La entrega de las medallas tuvo lugar en la Plaza Mayor de Valladolid, hasta donde se desplazaron los carruajes tras la prueba de Manejabilidad. El acto de entrega de medallas fue seguido por un buen número de público y estuvo respaldado por el propio presidente de la Federación Española, Luis Figueroa, que se desplazó hasta la ciudad castellana un día antes para apoyar e impulsar la disciplina.
La organización, a examen
Es la primera vez en 30 años que el Campeonato de España de Enganches cruza la frontera andaluza y la experiencia no ha sido del todo positiva. La organización de este último Campeonato, celebrado en la Antigua Escuela de Caballería, un espectacular pinar a pocos kilómetros del centro de la ciudad, era absolutamente inexperta en la puesta en escena de competiciones de Enganches. Aunque a groso modo el desarrollo del torneo más importante de cuantos se celebran en este país se produjo sin mayores contratiempos, lo cierto es que el goteo de pequeños detalles negativos, a nivel organizativo, fue continuo, lo que habrá que ir puliendo para los próximos acontecimientos. Con todo, en general, los participantes se mostraron absolutamente ilusionados por contar en España con una nueva sede en la que celebrar nuevos concursos, así es que, bienvenida sea.