La parada: enseñarla bien es aventajarlo todo en la doma y en la pista

Hacer parar bien a un caballo tiene que ver más con la doma que con la equitación

En este artículo vas a aprenderlo todo sobre la parada, donde la relajación del jinete y el suficiente tiempo para su enseñanza, son elementos claves para que el caballo haga correctamente este ejercicio. Desde cómo enseñar a mi caballo a parar o cómo le enseño a parar cuadrado, hasta qué debo hacer si mi caballo no permanece inmóvil. Estas y más preguntas quedarán perfectamente contestadas, todo ello con múltiples ejemplos y puntos de atención que permitirán a todos los jinetes a ejecutar a la perfección este importante ejercicio.

LA PARADA

¿Cómo enseño a mi caballo a parar?

Los caballos que no se quieren parar también suelen pesar sobre la mano, se mueven con demasiado peso sobre el tercio anterior en vez de sostenerse a sí mismos. Ahí está la solución del problema; no tiene sentido intentar hacer innumerables transiciones a la parada. Primero debes procurar que lleve más peso sobre el tercio posterior, por ejemplo, haciendo frecuentes medias paradas al trote. No pierdas la paciencia si quieres ensenarle a parar mejor. Tómate tu tiempo a lo largo de mucho entrenamiento para resolverlo.

Algunos caballos sencillamente están demasiado nerviosos y tensos para permanecer inmóviles durante la parada. Muchas veces esto repercute en el jinete, que también se pone tenso. Como decimos, tómate tu tiempo para solucionar este problema, no tiene sentido si solo dispones de una hora y pretendes practicar de todo. De vez en cuando, dedica un cuarto de hora o incluso más a este punto. Haz una parada e intentad relajaros. Ponte a leer el periódico o charla con alguien y si el caballo se mueve, vuelve a pararlo. Continúa practicando hasta que permanezca inmóvil. Repite varios días seguidos hasta que le parezca lo más normal del mundo.

Puntos de atención:

Hacer medias paradas.
Tómate tu tiempo para practicar la parada.

¿Qué hacer si el caballo se niega a avanzar?

Aunque parezca contradictorio, la parada debe ser activa. Un caballo que se duerme en la parada no está preparado para responder a la siguiente ayuda del jinete porque es posible que este aburrido. En tal caso, deberías motivarlo variando un poco el trabajo. Además, puedes activar al caballo haciendo cambios de ritmo al trote.

Es importante mantener a este tipo de caballo activo haciendo muchas transiciones. Un caballo que para sin actividad, tampoco puede volver a salir de manera activa. Por tanto, procura que la parada sea breve. Si notas que se viene abajo, debes partir enérgicamente. ¿Cómo notas cuando va mal? Procurando estar sentado muy relajado. Si el caballo se mueve correctamente, debe proporcionarte la sensación de «llevarte». En cambio, si esta sensación se convierte en algo flojo, o todo lo contrario, una tabla, algo va mal. Si después de la parada el caballo no quiere salir activo hacia delante, debes dar una ayuda suave con la pierna (no una contundente). Si no responde, puedes repetir la ayuda suave, en todo caso reforzada con un leve toque de la fusta. Pegarle sería excesivo, la fusta también puede servir de indicador de que el caballo debe aprender a responder enseguida a la ayuda suave.

Haz una parada y sal al trote activo inmediatamente. A los pocos trancos, vuelve a hacer parada y salir at trote enseguida. Repite esto varias veces hasta que el caballo sepa que debe permanecer atento, ya que le harás salir enseguida. Cuando salga bien, podrás mantener la parada un poco más, pero en cuanto notes que deja de estar atento, vuelve a las paradas breves y parte enseguida.

Puntos de atención:

Hacer muchos cambios de ritmo.
Hacer transiciones.

¿Cómo enseño a mi caballo a parar cuadrado?

Parar cuadrado significa que el caballo distribuye su peso sobre las cuatro extremidades. Esto tiene que ver con estar activo.

Si se detiene cuadrado, está listo para volver a partir acto seguido, sin tener que arrastrar primero un pie que se ha dejado fuera. Si el jinete está sentado correctamente y relajado, podrá notar si el caballo se ha dejado un pie: con una ligera presión de la pantorrilla de ese lado podrá corregirlo. ¿No responde? En tal caso le daremos la ayuda un poco más fuerte.

¿Qué debo hacer si no permanece inmóvil?

Hacer parar a un caballo tiene que ver más con la doma que con la equitación. Lo más importante es que el jinete esté relajado y si el caballo no quiere permanecer inmóvil, suele ser debido al jinete, que interviene demasiado y va sentado con demasiada tensión. Dedica media hora a practicar la parada. No intentes solucionar el problema en cinco minutos, es cuestión de tiempo. Y siempre hay que premiar y hablarle mucho.

Haz una parada, relájate y si es necesario ponte a charlar con alguien. Deja al caballo parado un rato así. ¿Recula? Empuja y vuelve a parar. No des patadas, simplemente una ayuda dosificada de la pierna. A menudo se da la ayuda demasiado fuerte, con lo que el caballo se asusta. Volver a parar y permanecer inmóvil. ¿Se mueve hacia delante? Retener suavemente, parar de nuevo y seguir parado.

Puntos de atención:

Tómate tu tiempo para enseñarle.
Premiar y hablarle mucho.

¿Cómo puedo evitar que se abra al parar?

Un caballo que para parar o una vez parado levanta la cara, ya no responde a la pierna porque bloquea el dorso y tensa la mandíbula contra la excesiva presión de la mano del jinete, y tampoco suele parar cuadrado. Procura activar al caballo, haz que responda a la pierna y que remeta los posteriores.

Puntos de atención:

Hacer medias paradas.
Dar cuerda con riendas de atar.
Montarlo con riendas fijas.

Fotografía de inicio: En la parada cuadrada el peso queda distribuido sobre las cuatro extremidades