Poetic Flare en los tres años sigue erigiéndose como una nueva obra maestra de Jim Bolger
El mitin de Royal Ascot acaba de celebrar su segunda edición sin gradas abarrotadas pero tampoco con el ambiente helado de 2020. Desperdigadas por las amplísimas praderas de este increíble hipódromo, 4.000 asistentes añadieron una pequeña dosis de ese glamour que es consustancial a este fabuloso ciclo de carreras. Como cada año, han sido los purasangre los que han marcado el nivel de lo que sin duda es el festival turístico por excelencia en el continente.
Royal Ascot 2021
Este año por primera vez se ampliaba a siete carreras por jornada, haciendo un total de treinta y cinco. Difícil destacar unas por encima de otras, aunque dado que aquí se construyen los grandes mítines hípicos, hay una yegua que ha vuelto a la competición a lo grande y anuncia grandes tardes en la segunda parte del año. Tiene un nombre evocador: Love. Es, por supuesto, hija del mejor semental del siglo XXI, Galileo, y el año pasado encadenó en sus tres únicas salidas este excelso historial: 1000 Guineas, Epsom Oaks y Yorkshire Oaks, no volviendo a correr desde esta última disputada el 20 de agosto.
Por lo tanto, a Ascot se presentó sin haber competido en el año, sin preparatoria alguna, y en todo un Grupo 1, el Prince’s of Wales Stakes, abierta a machos y la mejor prueba de medias distancias de todo el mitin. Es decir, la carrera ganada por purasangres como Dubai Millennium, Ouija Board, So You Think, The Fugue o Highland Reel. Conducida por Ryan Moore y favoritísima, Love demostró estar en plena forma, venciendo no por mucha distancia a Audarya (otra yegua de la que se espera todo durante el verano-otoño) y confirmando que es una de las principales candidatas al Arco del Triunfo, en disputa con su compañera de patio Snowfall.
Hablamos del Arco del Triunfo y ese mismo día de octubre se correrá el Prix de l’Abbaye, sobre 1000 metros, en el cual quién sabe si estará presente Oxted. El cada vez más eficaz sprinter se impuso con buena ventaja sobre el sorprendente Arecibo en el King’s Stand Stakes, un Grupo 1 que es objetivo marcado en el calendario para caballos de varios continentes. Uno de ellos, el norteamericano Extravagant Kid, fue tercero, medio cuerpo por delante del gran favorito, Battaash, primero y dos veces segundo de esta misma carrera y ganador del Abbaye el año que se disputó en Chantilly.
Por el lado de los tres años, Poetic Flare sigue erigiéndose como una nueva obra maestra de Jim Bolger, que ha seguido con él una línea similar y casi tan exitosa como en su día hiciera con la yegua Finsceal Beo. Ganador en Newmarket de las 2000 Guineas, sexto en la versión francesa y segundo en la irlandesa, en esta prueba que podríamos llamar las Guineas de Ascot, cruzó la meta más de cuatro cuerpos por delante del caballo al que batió en Newmarket, Lucky Vega, tercero aquel día.
Fotografía de inicio: Love cruzando la meta del Coronation Stakes en el mitin Real de Ascot
Texto: Jesús de Miguel
Experto en Turf/ jesdemiguel@europe.com
Fotografías: Hipódromo de Ascot