La emoción comenzaba el viernes con la victoria de Lovely Maria (montada por Kerwin Clark) en la carrera Longines Kentucky Oaks, considerada como la «little sister» del Kentucky Derby. Esta es una carrera del Grupo I para yeguas de tres años y tiene un recorrido de 1.800 metros. La dotación económica ha sido de un millón de dólares de los cuales 600.000 han ido a la gran Lovely Maria, que pudo lucir la característica guirnalda de lirios que cada año corona a la campeona.
Pero todos los ojos estaban puestos en la segunda de las carreras, el Derby de Kentucky, premiada con dos millones de dólares (de los que 1´4 son para el ganador). Más de 170.000 personas se citan en la pista para ver «los dos minutos más excitantes del deporte», y que acabaron con American Pharoah montado por Víctor Espinoza como el gran vencedor de la misma. Para el jockey mexicano es su segunda victoria consecutiva pues ya ganó el año pasado a lomos de California Chrome.
El Longines Kentucky Derby tiene una distancia de 2.000 metros y pueden participar únicamente purasangres de tres años. El derby de Kentucky forma parte de la Triple Corona, un grupo de tres carreras que se celebran anualmente en los Estados Unidos. Las otras dos son Preakness Stakes (16 de mayo en Baltimore) y Belmont Stakes (6 de junio en Nueva York). FUENTE: Eurosport