Estos son los hallazgos de un estudio reciente que ha permitido el reconocimiento internacional del Caballo de Retuertas de Doñana como raza autóctona de Andalucía. El estudio se ha publicado en la revista científica de zootecnia de mayor prestigio internacional, Animal Genetic. Se trata de la última población de caballos de Europa que vive en libertad, aislada de otras poblaciones, y que hoy cuenta únicamente con 55 individuos.
Por ello, investigadores de las Universidades de Córdoba y Complu-tense de Madrid, Cría Caballar, Yeguada de la Cartuja, Diputación de Córdoba y Estación Biológica de Doñana han puesto en marcha un ambicioso programa de conservación, gestión e investigación para asegurar la supervivencia de este reducido número de caballos únicos en el mundo.
Un genoma único. El equipo de científicos lleva años comparando la información genética de estos animales con otras razas y ha llegado a la conclusión que no tiene nada que ver con ningún caballo actual. Es más, dada la localización de la colonia (el corazón de Doñana), se pensó que podía estar emparentada con caballos de Sudamérica por la conexión histórica con el Puerto de Palos (Huelva), sin resultados convincentes. Por último, y es el tema que está centrando el estudio actual, se está buscando vinculación con el caballo berberisco, aunque a priori no existe ninguna relación entre ambas, según han manifestado a esta revista fuentes del CSIC. De modo que se trata de una punta de ganado bastante única en el mundo, aislada y protegida desde los años ochenta, pero con una carga genética e histórica milenaria.
El último paso. La comunidad científica internacional ya ha dado el visto bueno al hallazgo y en estos momentos la raza está a la espera de que el Ministerio de Agricultura y Ganadería la apruebe. Este paso administrativo se intentó dar hace apenas unas semanas, pero finalmente se ha aplazado hasta septiembre, cuando estén resueltos pequeños trámites administrativos.
La comunidad salvaje
Esta pequeña comunidad equina vive en estado salvaje y completamente aislada. De hecho, los propios científicos aseguran que los animales corren el riesgo de matarse unos a otros si se llegan a estabular. Hay que aclarar que este hallazgo no tiene nada que ver con el caballo marismeño, considerado también raza autóctona desde hace años. El caballo marismeño habita dentro del parque natural de Doñana, que es una franja natural que rodea a la Reserva de Doñana, protegida por el CSIC. Es justamente en el corazón, en la Reserva, donde se encuentra el Caballo de Retuerta, en una extensión de terreno aproximada de 3.000 hectáreas.