Hoy, hemos querido reproducir las palabras que Miguel Jordá nos concedió en una entrevista en exclusiva para Galope y que se mantienen en el tiempo.
Mallorquín de nacimiento, Miguel ha vivido durante toda su vida alrededor del mundo del caballo y es tal su pasión por este animal que con su esfuerzo y trabajo le llevaron a ganar su primer campeonato de España de 1984 junto a su caballo Dunhill. Nombrado Maestro de Equitación por la Federación Hípica Alemana, Técnico Deportivo Superior en Hípica así como Juez Internacional 3 estrellas en la disciplina, Jordá ha seguido enseñando todo su saber a nuevas generaciones.
Miguel, ¿cuándo comenzó a montar?
Desde muy pequeño en el colegio, ya que tenía caballos. En los recreos es cuando empecé a montar. Posteriormente se formó el primer club de equitación en Palma y allí continué tomando clases.
¿Y en el mundo de la competición?
En el Club Escuela de Equitación de Mallorca, pero en la modalidad de Salto. También he practicado algo de Completo y Volteo.
Miguel Jordá realizando una espalda adentro
¿Por qué se decantó por la Doma Clásica?
Mi primer caballo de Salto tuvo un problema y le costaba mucho saltar. Pero no me quería deshacer de él y por mediación de Pascual Ribot, mi primer profesor de Doma, me introduje en esta modalidad.
¿Qué ejercicio es el que más le gusta realizar?
En principio no tengo un ejercicio en especial que me guste más que los otros. Lo que sí me gusta es que los pueda enlazar bien. Pero sí puedo decir, que hay uno que me gusta menos hacerlo, porque no me sale muy bien, que son las medias piruetas al paso. Para mí son muy difíciles.
¿Qué cree que es lo más importante para la realización de un ejercicio?
Creo que lo más importante es tener el caballo bien preparado en la base. Es decir, que tenga el paso, trote y galope equilibrados y con una buena puesta en mano. Si tenemos esto, los ejercicios son mucho más fáciles de conseguir.
¿Qué piensa del PRE para esta disciplina?
En todas las razas para esta disciplina, hay pocos caballos con calidad y más cantidad de caballos con menos calidad. No creo que el PRE sea una excepción. En otros países están constantemente intentando mejorar su tipo de caballo, para que sea más competitivo en las pistas. Con el PRE, si quieren que triunfe, hay que buscar un tipo de caballo que sea más competitivo, pero por este motivo, no hay que buscar otro tipo de caballo. Hay que mantenerlo y mejorarlo donde no es competitivo.
¿Qué características prefiere en un buen caballo?
La raza y la capa del caballo, mientras sea bueno, me es indiferente. Me gusta un tipo de caballo atlético, con chispa, pero al mismo tiempo con buena cabeza y voluntad para aprender y trabajar.
Nuestro protagonista participando en un Nacional de Doma
¿Cómo ve el panorama ecuestre de estos momentos?
En Doma, en los últimos diez años ha mejorado muchísimo en todos los aspectos. Por otro lado, la rueda no se puede parar. El equipo español ha tenido unos resultados internacionales impensables para nosotros hace algunos años. Pero, por otro lado, hay que mejorar mucho la competición nacional, para que estos resultados en un futuro se puedan mantener.
¿Cómo se debe realizar un correcto piaffe? ¿y un passage?
Sin fusta.
Cuéntenos cómo llegó hasta usted Dunhill
Cuando estaba estudiando en Alemania me lo cedieron para poder competir. Al mismo tiempo, pude participar en el campeonato de España.
¿Tenía preparado algún otro caballo más para el campeonato del 84 donde ganó o sabía que Dunhill era el apropiado para ganarlo?
No tenía otro caballo para poder competir al nivel del campeonato.
Recibiendo el 1º Premio en el Nacional de Doma de Barcelona 2004, de manos de Rosa Mª Fradera
¿Cómo era Dunhill?
Era un caballo muy juguetón. Al mismo tiempo, le gustaba mucho tragar aire. Un día tragando aire, apoyó los dientes del maxilar superior en un sitio un poco estrecho y al tirar para tragar aire se quedó enganchado con los dientes y se rompió el maxilar. Por consiguiente, lo tuvieron que operar para unirlo y estuvo bastante tiempo fuera de la competición.
¿Ha tenido algún caballo que le haya marcado especialmente?
Epox. Era un caballo con pocos medios para competir. Pero con una voluntad impresionante.
Texto y Fotos: Entrevista Revista Galope