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Cómo obtener tres cambios al tranco seguidos

Arthur Kottas da solución a los problemas más frecuentes

En los cambios al tranco el caballo cambia de pie a cada tranco, a lo largo de un número predeterminado de trancos.

CAMBIOS AL TRANCO

Para que el caballo pueda empezar a aprender los cambios al tranco, debe saber ejecutar correctamente todos los ejercicios previos: debe ser capaz de cambiar cada dos trancos con facilidad, sin tensión alguna. Observa la secuencia de fotografías más adelante.

Enseñar los cambios al tranco

  • Primero hay que aumentar la energía del galope. Hay que obtener una buena cadencia, y mucha impulsión en el galope, que debe ser algo más rápido que para los cambios cada dos trancos.
  • El caballo debe estar absolutamente recto.
  • Al final del lado mayor de la pista, galopando en firme, cambia a trocado e inmediatamente después a firme.
  • Repite dos o tres veces, acaricia y vuelve el caballo a la cuadra por hoy.

Trabaja este ejercicio en los días siguientes.

Luego, repite la misma secuencia en el centro del lado mayor, en el primer tercio, el segundo tercio…

Para obtener tres cambios al tranco seguidos, haz galope trocado y en el centro del lado mayor pide firme/trocado/firme, con ayudas ligeras.

Sigue trabajando estos tres cambios al tranco hasta confirmarlos, luego se puede pasar a cuatro seguidos. Hay que aumentar el número de trancos progresivamente, una vez confirmado el número anterior.

Una secuencia de cambios al tranco, empezando a la derecha. En la cuarta imagen, el caballo ha cambiado a la izquierda; cuatro imágenes después a la derecha, y en la última imagen ha vuelto a cambiar a la izquierda

 

Mis consejos para los cambios al tranco

  • No hay que mover el torso excesivamente, hay que mantener una buena posición.
  • No hay que mirar hacia abajo, ya que esto hará que el caballo pierda ritmo: mira hacia delante, entre las orejas del caballo.
  • La mano debe mantener un buen contacto con la boca del caballo, y la cabeza del caballo debe mantenerse recta.
  • Usa las piernas algo más para pedir los cambios, pero sin atrasarlas demasiado. Si lo haces perderás demasiado tiempo y puedes perderte el siguiente cambio.
  • Aplica la nueva pierna exterior inmediatamente después del primer cambio…TAC/TAC/TAC… Y sobre todo no mantengas la pierna apretada contra el caballo. La pierna debe permanecer relajada para poder dar las ayudas para cambiar rápidamente.

Problemas frecuentes en los cambios al tranco

Se encuentran los mismos problemas que en los cambios aislados o los cambios cada dos trancos.

El caballo pierde cadencia

  • La cadencia del galope no es la correcta.
  • El galope no está suficientemente reunido, falta energía y el caballo lleva demasiado peso sobre el tercio anterior.
  • El ritmo y el momento de las ayudas es incorrecto. Los cambios al tranco producen un balanceo apenas notable de la parte superior del cuerpo, que exige una perfecta coordinación de las ayudas y mucha relajación. Intenta ser más consciente de tu cuerpo, hazte una imagen mental (debes controlar el cuerpo).

 

El caballo alterna los cambios al tranco con cambios a dos

Hay que recordar que los cambios al tranco son muy difíciles para el jinete, que debe aplicar sus ayudas con gran rapidez y precisión, manteniendo las piernas relajadas.

Si el caballo pierde cadencia y reunión en el galope requerido para los cambios al tranco, puede volver a cambiar cada dos trancos. Para evitarlo deberás:

  • Concentrarte en tus piernas y mantener el contacto ligero con ambas riendas.
  • Tener el ritmo de los cambios en la mente y en el cuerpo.
  • Mantener la rectitud, no aflojar ni correr más, procurando mantener el mismo equilibrio y ritmo del galope.

El caballo no consigue hacer el tercer cambio al tranco

Es relativamente fácil conseguir el cambio izquierda/derecha o derecha/izquierda, pero suele haber mayor dificultad para conseguir el tercer cambio seguido: el tercer cambio debe ser ultra rápido, pero ante todo más refinado que los dos precedentes.

Por esto suele haber tendencia a exagerar demasiado, o aplicar las ayudas demasiado fuertes. Intenta ser consciente de esto y evitar tales errores. Si el caballo necesita ayudas más firmes hacia un lado, tenderá a cambiar con mayor facilidad de ese lado. Hay que afinar las ayudas lo mejor posible. El cambio debe ser fluido y montado hacia delante.

 

Texto y fotos: La Equitación de Kottas, libro editado por Grupo Lettera, S. L.

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