Aprovecha al máximo la tecnología
Analizar y aprender de tus vídeos es una estrategia imprescindible para cualquier jinete de competición que busque mejorar su rendimiento. A continuación le mostramos cómo aprovechar al máximo el análisis de secuencias de vídeo para mejorar su monta
Ver vídeos de tu recorrido puede ser un poco como escuchar tu propia voz: ¡sabes que lo necesitas, pero no quieres! Pero así como todos estamos acostumbrados a escuchar nuestras propias notas de voz o ver nuestras locuciones en off de TikTok, sentirse cómodo con los vídeos de mientras montamos puede ser realmente útil.
Ver vídeos de educación retrospectiva o de competición (¡los buenos y los malos!) permite a los jinetes desglosar visualmente su forma de montar y el desempeño de su caballo, identificando tanto las fortalezas como las debilidades. Es una herramienta de autoentrenamiento que puede ayudar a comprender lo que sucede durante un recorrido (o varios recorridos) para poder comenzar a descubrir cómo realizar mejoras.
El análisis de vídeo proporciona una perspectiva única que es imposible capturar desde la silla. Ofrece un punto de vista objetivo de la forma de montar, el movimiento del caballo, la capacidad de respuesta y la ejecución general de su paseo. Al revisar las imágenes, los jinetes pueden obtener información sobre su técnica, sincronización y estrategia, que son cruciales para perfeccionar el rendimiento y lograr el éxito competitivo.
Pasos para aprovechar al máximo sus vídeos de entrenamiento
1. Prepararse para el éxito
El primer paso para un análisis de vídeo eficaz es, por supuesto, asegurarse de tener imágenes decentes para empezar. Coloca tu teléfono en un barril o contra una cerca, cuélgalo de un árbol o soborna a tu hermano menor para que te filme un rato. Busca un vídeo claro y estable que muestre la mayor cantidad de recorrido posible desde un ángulo útil (como el centro de un círculo, en C, o con una vista lateral de una buena cantidad de saltos). Si es posible, tener imágenes desde múltiples ángulos puede proporcionar una visión completa del recorrido. Puede que te veas genial desde el frente, pero te das cuenta de que la parte inferior de tu pierna se está deslizando hacia atrás cuando ves una vista lateral, por ejemplo.
2. Mirar sin juzgar
¡Es difícil! Pero inicialmente, mira el vídeo de principio a fin sin criticar. Esta primera visualización ayudará a tener una idea general del recorrido y te preparará para un análisis más detallado. Y sí, es importante incluso cuando sabes que tuviste un “mal” día.
3. Tener en cuenta lo malo y lo bueno
Antes de profundizar en lo que salió mal, identifica lo que salió bien. Resalta los momentos de buena postura, comunicación efectiva con tu caballo, o momentos en los que lograste una distancia clara o tuviste una gran curvatura. Reconocer tus fortalezas refuerza las técnicas positivas y aumenta la confianza. Ahora, observa más de cerca los aspectos del viaje que no salieron según lo planeado. Busca patrones de errores, descubrir que tus manos se retiran durante la transición del galope o luchar por mantener el impulso en las esquinas. Identificar estas áreas es crucial para comprender que necesita más atención en su capacitación.
4. Analizar el rendimiento del caballo
El análisis también debe incluir el rendimiento del caballo. ¿Tu caballo tiende a acelerar el paso cuando sales de un giro cerrado hacia la derecha? ¿Se ablanda muy bien cuando llevas las manos un poco más arriba? ¿Está escuchando y alerta cuando estás calentando o enfriando? Busca detalles sobre cómo responde a tus buenos y malos momentos, e intenta descubrir a qué parte específica de tu manejabilidad está reaccionando. Y luego, por supuesto, estar atento a las señales de incomodidad, falta de comunicación o resistencia.
5. Consultar con un entrenador o mentor
Sí, ¡aprovecha la sabiduría de tu instructor! Compartir tu vídeo con un entrenador o mentor experimentado puede brindarle información adicional. Pueden ofrecer una perspectiva diferente, posiblemente notando cosas que quizá hayas pasado por alto. Incluso puedes compartir en las redes sociales o con amigos si no tienes un entrenador al que puedas enviarle vídeos.
Texto: FEI / Sophie Baker