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La importancia de los ejercicios laterales en la doma

El giro sobre las manos tiene un objetivo similar a la cesión a la pierna

Los ejercicios laterales –particularmente la espalda adentro– juegan un papel importante en la doma del caballo, mejorando la flexibilidad, la rectitud, la fuerza y la atención a las ayudas, y favorecen el proceso hacia la capacidad para la verdadera reunión.

EJERCICIOS LATERALES

Para mejorar el proceso de aprendizaje, inicialmente deben introducirse por el orden indicado en este artículo.

EL GIRO SOBRE LAS MANOS

El giro sobre las manos, ejecutado por igual a ambas manos, es un ejercicio para dar las primeras lecciones al caballo para moverse de lado. Por lo tanto, tiene un objetivo similar a la cesión a la pierna. Este ejercicio se puede enseñar tanto pie a tierra como montado.

El giro sobre las manos montado también es un buen ejercicio para ayudar al jinete a aprender la coordinación del asiento, la pierna y la mano.

Sin embargo, es un ejercicio que no se debe usar demasiado a menudo, ya que no fomenta el movimiento hacia delante del caballo. Precisamente al restringir el movimiento del caballo hacia delante hasta el mínimo, puede tener un efecto que desanima a un caballo joven o verde si se practica excesivamente. Por la misma razón no es aconsejable completar el giro de 180º cada vez; en su lugar la mayoría de las veces los giros deberán ser de 90º solo, haciendo avanzar al caballo inmediatamente después. Si un caballo verde muestra signos de ponerse nervioso con el giro sobre las manos, será mejor continuar con ejercicios laterales variados.

Aparte de enseñar la respuesta a la ayuda lateral de la pierna, el ejercicio del giro sobre las manos favorece que el caballo tenga que remeter el posterior interior más hacia el interior y por tanto más por debajo de la masa y por delante del posterior exterior. De este modo trabaja la cadera y los corvejones, fomentando su flexibilidad y fuerza.

REALIZAR EL GIRO SOBRE LAS MANOS

Iniciamos este ejercicio con una parada cuadrada sobre la pista interior (la línea de cuarto). Ahora empezamos a girar al caballo con la cabeza dirigida hacia la pista exterior. Los giros de 90º únicamente se pueden hacer parando al caballo en ángulo recto con la pista exterior, con la cara bastante cerca de la pared. No obstante, para hacer un giro de 180º debe tener espacio suficiente para completar el giro sin chocar contra la pared con el tercio posterior.

El jinete pide el giro sobre las manos haciendo una parada cuadrada y tranquilamente pero, acto seguido, indicando la dirección del giro con la rienda interior, manteniendo el contacto con la rienda exterior para evitar que el giro sea demasiado grande.

La pierna interior debe estar justo detrás de la cincha y es aplicada para mover los posteriores paso a paso.

Arthur Kottas ejercicios
El giro sobre las manos de solo 90º se puede hacer en ángulo recto por la pista exterior, con la cabeza del caballo bastante cerca de la pared. Sin embargo, para hacer un giro de 180º, el caballo debe tener espacio suficiente para completar el giro sin tocar la pared con el tercio posterior

 

La pierna exterior también se sitúa detrás de la cincha al objeto de recibir y controlar cada paso del caballo.

Ejemplo

  • Para hacer un giro sobre las manos a la derecha, hacer una parada cuadrada sobre la pista interior o la línea central.
  • La pierna derecha y la rienda derecha indican la dirección del giro (a la derecha, en este caso).
  • La pierna izquierda y la rienda izquierda dan soporte al exterior del caballo y controlan la velocidad.
  • Al aplicar la pierna derecha, la grupa se mueve hacia la izquierda; la pierna izquierda recibe y controla el movimiento. El caballo cruza los posteriores mientras los anteriores continúan haciendo un semicírculo hacia la derecha.
  • Una vez completado el giro deseado, el caballo debe avanzar inmediatamente al paso.

Giro sobre las manos

Secuencia que muestra el giro sobre las manos de 360º

 

PUNTOS DE ATENCIÓN

  • El movimiento debe ser ejecutado con la secuencia correcta del paso.
  • Hay que mantener una ligera incurvación en la dirección del movimiento en todo momento.
  • El caballo tano no debe retroceder ni precipitarse en ningún momento.
  • El caballo debe aceptar el contacto sin resistencias ni quedarse detrás de la mano.

FALLOS Y CORRECCIONES

  • El caballo puede mostrar demasiada flexión del cuello en la dirección del giro. Esto se puede contrarrestar o corregir usando menos rienda interior y más pierna interior empujando contra la rienda exterior. Hay que mantener el contacto ligero y en ningún momento la mano debe tirar hacia atrás.
  • Resistencia a la mano o soltar el contacto puede corregirse manteniendo (o ajustando) la rienda exterior.
  • Cualquier tendencia a retroceder puede ser contrarrestada por el jinete manteniendo el impulso hacia delante teniendo las dos piernas en contacto con el caballo.
  • Si el caballo describe un pequeño círculo, mayormente se debe a la falta de coordinación de las ayudas. Para corregirlo primero hace falta conseguir una parada cuadrada. Después, pedir solo un paso, y cuando lo da, acariciar inmediatamente. No obstante, con un caballo “pesado” de delante puede ser necesario admitir un círculo pequeño para que pueda levantar las manos suficientemente.
  • La pérdida de la secuencia del paso suele ocurrir a consecuencia de la falta de impulso hacia delante del caballo.

Uno de los mayores problemas que podemos encontrar al hacer el giro sobre las manos es que el caballo no levante las manos lo suficiente (sobre todo si se trata de un caballo “pesado” de delante). Si esto fuera el caso, normalmente las manos del caballo se “lían” de tal manera que cualquier movimiento le es virtualmente imposible. Otra consecuencia de esto es que el caballo no levante suficientemente una mano (normalmente la exterior). En ese caso el caballo volvería a equilibrarse girando con la mano interior.

Un problema potencial del giro sobre las manos puede surgir con caballos por naturaleza “pesados de delante”. Al levantar los pies tiende a trasladar el centro de gravedad hacia delante, cargando más peso sobre los anteriores, lo cual puede provocar una pérdida de coordinación

 

Para evitar estos fallos debemos asegurarnos de que el caballo describe un minúsculo círculo con las manos, en vez de permanecer en el mismo lugar durante el giro.

 

Texto y fotos: La Equitación de Kottas, libro editado por Grupo Lettera, S. L.

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